20.12.10

Con los enemigos, la misma atención o más que con los amigos

…pues en el ruido que hacen los contrarios
se puede adivinar sus puntos flojos, 
sus adornos falsos, su camino abierto;
para así ganar la batalla.


A los enemigos hay que escucharlos 
para interpretar su mirada,
con las mismas ganas que se tiene en ser más libre, 
pero sobre todo victorioso.

14.12.10

No sé si existo o si todo es una simple mirada engañada


No sé si existen los besos inesperados, los abrazos gratuitos, los amores desesperados, los caminos inexplorados, las miradas inexpresivas, los gritos silenciosos, los gestos vacíos, las sonrisas gratuitas, los contactos fríos, las reuniones inútiles, las relaciones odiosas.

No sé si existes tú, simplemente porque incluso dudo de si existo yo. 
Tal vez seamos ambos una manera de movernos por la nada, dejando olores y sabores flotando, 
entre otros muchos perfumes desconocidos. 
No sé a donde voy ni sé por qué me muevo así. 
Me dejo llevar y te encuentro todos los días. 
Con eso me doy por muy satisfecho.

El monstruo era pobre; y además no tenía buena cara



Miré hacia arriba y encontré al monstruo, era ojigrande, cuellicorto, larguibrazo, ipatoso. 

Era cariñosamente dulce y me sonreía con baba de color avellana, acercándose hacia mi con pasos extraños y lentos. 

Creo que intentó decirme algo pero juro que no entendí qué; creo que preguntaba por una calle. 

Le miré de arriba abajo, abrí los ojos como si de un conocido se tratara, sonreí levemente y le lancé una moneda al suelo, mientras daba media vuelta.