Pero también el Arte sin Academia, el Arte Simple. Y sin duda también el Arte de la Locura, el Arte Marginal, el Arte de los enfermos, incluso el Arte Terapia que se hace como método de tratamiento por y para personas, pero sin ninguna formación artística anterior.
El arte tiene derecho a ser malo, incluso a ser bueno siendo malo.
Los conceptos de lo que es Arte y lo que no es Arte se difuminan, pues somos cada uno de nosotros los que compatimentamos esto. Ni los propios creadores saben (quieren) adscribirse a una tendencia artística determinada. Ni sabemos ni nos importa. Las etiquetas deben ser otros los que las pongan e incluso las que las inventen.
Nosotros os miramos a vosotros, y sois vosotros los que nos miráis a nosotros.