Estoy agotado por no sé bien qué asuntos… tal vez inesperados.
No se puede programar el tiempo, es inevitablemente mucho más libre que uno mismo, más capaz de ayudarte o incluso de zancadillearte según le venga en gana.
Sigo sin saber a qué hora me iré a la cama, depende de que me canse todavía mas.
Estamos en manos de las casualidades, de lo que no controlamos.
Sigo sin saber a qué hora me iré a la cama, depende de que me canse todavía mas.
Estamos en manos de las casualidades, de lo que no controlamos.
Pero mientras tanto seguimos pensando que lo dominamos todo.
Esto nos ayuda a superar los contratiempos sin darnos cuenta de nuestra debilidad, es decir, seremos más felices mientras estemos menos informados.
Mañana me levantaré más pronto.
Y al menos si suceden cosas no programadas no me sentiré culpable por levantarme tarde.
Y tendré más tiempo para no hacer nada.