Somos entre raros y muy raros. Viendo esto de arriba, uno nunca quiere imaginar qué es vida, que por una casualidad de la suma de elementos que no dominamos podríamos haber sido helechos, algas o seres tan chulos como nosotros.
Tampoco sabemos si estas plantitas tan raras tienen capacidad para pensar. Creemos que no, pero son tantas las cosas que creemos pero no sabemos, que vete a saber si lo sabemos o no lo sabemos.
¿Alguien se imagina a las algas, a los helechos, a las moscas cojoneras pensando sobre nosotros y viéndonos como monstruos enormes que cambiamos de color cada día varias veces?