¿Qué pensará una araña cuando se ve reflejada en un espejo, en algo que refleje su forma y su rostro? ¿Tendrá miedo de sí misma? ¿Se sorprenderá?
Volviendo a lo mismo y sabiendo que los gatos o perros se sorprenden al verse, pues no se reconocen, podríamos preguntarnos por nosotros mismos.
Si nunca nos hubiéramos podido ver reflejados en nada… ¿qué sentiríamos al vernos por primera vez reflejados?
Incluso podríamos ir un punto más lejos. Si nos hubiéramos visto en un espejo de jóvenes, y ahora nos viéramos pasados un par de décadas… ¿qué sentiríamos?